El Gobierno de España está comprometido en fomentar el uso de la inteligencia artificial (IA) en la ciberseguridad, como parte de su estrategia para posicionar al país a la vanguardia tecnológica. Esta iniciativa es un eje central de la Estrategia de Inteligencia Artificial 2024, un plan que continúa las acciones previamente desplegadas por el Ejecutivo y refuerza su compromiso con el liderazgo en el desarrollo y aplicación de soluciones de IA. Desde La Moncloa, al aprobarse esta estrategia, se destacó la intención de consolidar a España como un referente en IA y ciberseguridad, subrayando que «este plan reafirma nuestra posición como líderes en la vanguardia tecnológica».

Uno de los organismos públicos que ha adoptado con mayor rapidez el potencial de la IA es la Agencia Tributaria, pero siempre bajo el principio de «intervención humana», alineándose con las directrices generales del Ejecutivo para asegurar un balance adecuado entre automatización y supervisión humana.

Estrategia para la combinación de IA y ciberseguridad

La Estrategia de Inteligencia Artificial 2024 incluye como uno de sus puntos clave el fomento de la combinación de IA y ciberseguridad. Este enfoque se despliega a lo largo de 2024 y 2025, con una inversión de 1.500 millones de euros, adicionales a los 600 millones ya movilizados a través del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia y su adenda. Este esfuerzo financiero subraya la ambición del Gobierno de consolidar y expandir el uso de la IA en todos los sectores de la economía y la administración pública.

Promoción de la IA en el sector privado

Un aspecto destacado de la estrategia es la promoción del desarrollo de la IA en el sector privado, especialmente entre pymes y autónomos. Para facilitar esta adopción, se ha lanzado el programa ‘Kit Consulting’, dotado con 300 millones de euros, destinado a que los proyectos empresariales de menor tamaño puedan contratar servicios de asesoramiento para implementar tecnologías de IA. Además, el programa ‘Kit Digital’ ha sido ampliado con la incorporación de nuevos productos de IA y una inversión adicional de 350 millones de euros.

Para apoyar a las empresas que desarrollan soluciones de IA, se destinarán 400 millones de euros a través del Fondo NextTech, con el objetivo de facilitar la financiación y fomentar la innovación en este ámbito crucial.

Futuro marco legal y ecosistema de ciberseguridad

El impulso a la ciberseguridad se completa con la futura ley de ciberseguridad, que establecerá un marco legal claro e integral para el desarrollo de esta actividad en España. Esta legislación mejorará la protección de los sistemas de información, redes y datos, y fomentará la creación de un ecosistema empresarial en el ámbito de la ciberseguridad con IA. El objetivo es estimular la innovación, la colaboración y la adopción de tecnologías de IA en la ciberseguridad, contando con el Instituto Nacional de Ciberseguridad (INCIBE) como pieza clave en esta misión.

Asimismo, la Agencia Española de Supervisión de la IA (AESIA), pionera en Europa, desempeñará un papel crucial en la definición de buenas prácticas para el uso de la IA y garantizará que los modelos que se desarrollen cumplan con las normativas europeas en materia de IA.

Impacto y desafíos de la IA en la ciberseguridad

Estas iniciativas se lanzan en un momento en el que el impacto de la IA en la ciberseguridad está creciendo significativamente, abarcando tanto la prevención como la respuesta a incidentes. La IA presenta desafíos, pero también ofrece herramientas avanzadas para la detección y prevención de amenazas mediante modelos predictivos, lo que fortalece la capacidad de respuesta ante ciberataques.

La ciberseguridad ha emergido como una de las principales preocupaciones para los líderes empresariales, como quedó reflejado en los recientes encuentros del Foro Económico Mundial, celebrado en la ciudad suiza de Davos. A nivel global, la ciberseguridad se ha convertido en un elemento inseparable de la digitalización, especialmente con la llegada de transformaciones tecnológicas como la IA.

Ciberseguridad y soberanía estratégica

La ciberseguridad es una pieza fundamental para la soberanía estratégica de las naciones y un componente esencial en la generación de confianza y seguridad, elementos clave en la transformación tecnológica de la economía. Los sectores económicos más críticos dependen en gran medida de las redes y los sistemas de información, que son altamente interconectados. Por ello, es vital asegurar los niveles más altos de protección en las infraestructuras críticas y los servicios esenciales, tanto en el sector público como en el privado.

Reforzar la ciberseguridad es necesario no solo para proteger a los ciudadanos y su privacidad, sino también para fomentar la confianza, la innovación y la digitalización. Según el Ejecutivo, «la ciberseguridad es un componente intrínseco de la digitalización y del desarrollo de nuevas tecnologías, especialmente la IA, y su fortalecimiento es determinante para la soberanía estratégica y para garantizar una transición digital segura».

España parte de una posición sólida en ciberseguridad, siendo el tercer país europeo, solo por detrás de Reino Unido y Estonia, en el Índice Global de Ciberseguridad (ICG) evaluado por las Naciones Unidas.

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